Quizás, muchas veces nos enfrascamos en nuestros quehaceres en nuestro mundo y no tenemos tiempo de abrir nuestra perspectiva y darnos cuenta que hay otras muchas cosas que verdaderamente merecen la pena.
No solo lo digo a nivel personal sino como asociación
deportiva como lo es nuestro club de Atletismo Virgen del Espino. A veces
parece que los resultados deportivos de nuestros atletas es lo más importante,
pero cuando vives actos deportivos como se vivió el pasado viernes en el
colegio de San José de Calasanz es cuando te das cuenta que clubes como el
nuestro no pueden faltar nunca para dar su apoyo.
Viernes 27 de enero era el día marcado por el increíble grupo de profesores que trabajan en el colegio de San José, para hacer un acto solidario llamado KILÓMETROS POR LA PAZ. A las 11h45´se formaban en las pistas los 5 aros olímpicos con todos los niños uno vestidos de rojo, otros de azul, otros de amarillo, otros de negro y otros de verde, aros olímpicos que representan los 5 continentes entrelazados como señal de unión. Todos los niños concienciados de la importancia de este acto y el valor humanitario que representa.
La prueba consistía en recorrer un circuito marcado previamente de 210 metros donde participaban tanto los niños como sus familias, se dio salida a las 12h15´a los chicos de sexto curso, los mayores, junto con los adultos que quisieron emprender la aventura, cada 5´salia un curso inferior así hasta llegar a los alumnos de 3 años, mientras tanto todo aquel que resistía seguía dando vueltas a nadie se le instaba a abandonar todo dependía de sus fuerzas y de su ilusión, que precisamente fue lo que más tenían, se contaban las vueltas que cada uno daba para al finalizar tras 70´ corriendo sumar los kilómetros obtenidos por todos, era un trabajo en equipo donde el dinero que se recaudará iría donado a la asociación Avanzando y Asociación Únicos. Pero los niños y niñas en su mente tenían que eran kilómetros por la paz, cuantos más kilómetros más paz conseguiríamos, es la única explicación que se puede dar al hecho que muchos niños de 8 y 10 años cubriesen la distancia de 10 km, y apenas se les notara el cansancio.
El resultado 3.497 vueltas 734,37 km, miles de pasos hacia
la paz y 916,76 euros recaudados, pero sobre todo el espectáculo de ver a casi
300 niños corriendo y casi un centenar de adultos. Como digo un espectáculo que
nuestro club amante de inculcar a los niños la actividad física como pilar
fundamental como una forma de vida saludable, no se quiso perder y estuvo
presente como no podía ser de otra manera.
Enhorabuena por esas iniciativas tan importantes como
necesarias.
Dentro de este fin de semana y a más de 300 kilómetros de Membrilla, concretamente en Sevilla, se celebró la media maratón de la ciudad hispalense, donde tuvimos representación, pues Ángel Fuentes se desplazaría a dicha ciudad para disputar y disfrutar de una media maratón llana y rápida, aunque la fría mañana impidió mejores marcas.
Al final el bueno de Ángel volvió a disfrutar, bajando una
vez más de la hora y media, que no esta nada mal para este veterano corredor de
nuestro club. Enhorabuena.